KILLER OBSECION´S part 2

La almohada bastante húmeda, entre las babas y las lagrimas de Anette que por cierto la tenia pegada a la cara como calcomanía; curiosamente este sueño ya lo había tenido en varias ocasiones, pero rara vez recordaba todo hasta ahora; tal vez unas 10 veces había sido la espectadora de tan terrible tragedia y hoy por fin sabia que le había ocurrido a esta joven. Se incorporo en la cama para ver el reloj eran casi las 5 de la mañana en un día normal estaría corriendo para irse a estudiar pero era domingo podía quedarse hasta que su pereza lo permitiera, no quería seguir durmiendo estaba muy perturbada, ¿por qué precisamente era ella quien tenía que ver ese tipo de cosas?, quizás en otro momento no hubiera sido tan traumático a no ser porque su madre moriría 6 semanas atrás dejándola sola y muy sensible al dolor ajeno, le dio la vuelta a la almohada la temperatura estaba descendiendo drásticamente, sintió como una bola de pelos le tocaba los pies era su gata única y fiel compañía, la tomo entre sus brazos mientras le lamia la mejilla mirando al techo pensaba que sería lo que debía hacer ahora que se encontraba sola y con toda esa casa para ella, afortunadamente su madre le dejo una modesta herencia que le permitía seguir estudiando sin tener que trabajar, sin embargo el hecho de saberse sola en una casa tan grande para ella la atemorizaba un poco, así que decidió que podía rentar 3 o 4 habitaciones así no se sentiría sola y tendría dinero extra, después de un rato de meditar en todo lo que debía hacer se quedo dormida nuevamente...

Sintiendo un cálido abrazo abrió los ojos para darse cuenta que ya no estaba en ese maldito convento si no en los más finos aposentos que ella podría haber deseado,  sabanas de seda, un lecho digno de una Reina, una enorme chimenea cortinas de fino terciopelo la habitación era casi tan grande como su modesta casa En ese momento recordó a sus padres y si en el claustro se habrían dado cuenta de su ausencia por un momento se lleno de pánico sin saber qué hacer, salió de la cama de un salto se miro frente al espejo contemplando la pijama más linda que nunca tubo, a un lado de la cama había un gran ropero entre abierto de donde se dejaban ver telas tan suaves y delicadas al tacto abrió la puerta para ver los vestidos mas regios que ni en sus sueños imagino, los vio todos de arriba abajo deseando probárselos todos pero el 3er y 7mo pecado capital la hicieron reflexionar así que escogió el más sencillo y modesto de todos,  a pesar de eso lucia tan bella sentándose frente al espejo para peinarse, -pensó que quizás era un sueño del que no quería despertar- tomo de una caja 2 listones que combinaban haciéndose una trenza la cual le llegaba casi a la cintura, mirando hacia el piso se hizo muchas preguntas... ¿que hago aquí? ¿Quien me rescato? ¿Debo usar esta ropa? ¿Quien es el dueño de todo esto? La puerta se abrió ella volteo asustada e intrigada una mujer regordeta y con uniforme llevaba el carrito de servicio -el desayuno está listo señorita- sonriendo le puso la mesa junto a la silla -oh por lo que veo ya está dispuesta- en la mesita coloco una charola de plata con fruta, pan recién hecho, un recipiente con mantequilla así como una jarra con leche caliente, -espero que el desayuno sea de su agrado- ... gra...gracias... ¿que hago aquí? ¿Quien me trajo? -tranquila mi niña estas a salvo en cuanto termines tu desayuno podrás ver al señor de la casa y el te aclarara tus dudas...

El sol resplandecía afuera y el ruido de los carros la despertó, pasaban de las 10 de la mañana, ¿pero que que diantres ella soñaba con esa niña era como si en sus sueños le pusieran una película de terror?, lo extraño era que ahora seguía la continuación a través de ellos.... Pero tenía muchas cosas que hacer si quería rentar esas habitaciones, sacar muebles viejos, libros, y toda clase de artilugios que su madre había recabado desde hacía muchos años, la mayoría herencias de sus antepasados, casi todos en perfecto estado así que pensó que venderlos sería lo mejor, recordando en ese momento a su amigo Leo nieto de un anticuario bastante cascarrabias pero recto y justo con todos. Viendo las condiciones de las habitaciones había que hacerles varios arreglos y comprar muebles nuevos, necesitaría todo el dinero posible para dar un mejor aspecto a  la casa, bajo a la sala y tomo el teléfono.
-buenos días ¿se encuentra leo?
-si permíteme un momento... Leoooo! te llaman por fon es Anny
-¿holaaa como estas?
-ya mejor gracias por preguntar. Necesito de tu ayuda quiero hacerle unos arreglos a la casa y rentar habitaciones, mi madre tenía muchos muebles y cosas algunas con más de 100 años ¿podrías venir hoy a la casa? para que veas que cosas se pueden vender
-ash!! Me agarras en mi día al spa... mmm okey a ti no te puedo negar nada querida estoy ahí en la tarde
colgó y sonrió para sí misma, su estomago rugió tenía hambre y su gata maullaba pidiendo comer, abrió el refrigerador casi vacío de no ser por la temperatura en el tendría telarañas, un nabo, medio litro de leche con 7 días caduca un paquete de salchichas verdes (no, no era su color original) con lo de su madre no estuvo en sus cabales por casi 1 mes así que no había pagado la luz y se la cortaron cerca de 1 semana y tampoco había hecho el super, sus amigos se habían encargado de ella en ese tiempo, pero era hora de que regresara a su vida normal, nuevamente tomo el teléfono y pidió una pizza, que para fortuna suya llego en 17 min. se sentó a la mesa puso 2 platos imaginando que aun estaría ahí su madre que de ser así, la hubiere regañado por comer "porquerías" para ella todo ese tipo de comida era solo desperdicio de dinero, y enseguida sacar todo el arsenal de trastes y preparar un buen desayuno con huevos, jamón, jugo y fruta... Miro hacia el patio estaba lleno de hojas secas y muchas bolsas de basura, tomo una rebanada de pizza y se la dio de comer a Milly que no chisto ella estaba feliz de comerse lo que le diera su ama, acostumbrada a comer rápido no tardo más de 20 min. En comer aunque para ella fuera una eternidad, se levanto de la mesa y tomo una gran bolsa de basura comenzó a echar todo vestigio de comida en el refrigerador, sobre la mesa había un sin número de vasos desechables así como platos y cubierto, trastos viejos, recetarios anticuados que su mama guardaba con tanto esmero (era de esas señoras que no les gusta el Internet o usar una computadora –son cosas del demonio!!!- siempre le decía a su hija) revistas de Reader´s Digest de los 70´s y mas arcaicas colecciones de manuales y garantías de televisiones y sinfonolas, muñecas bizcas y rotas algunas de porcelana aun en buen estado, sillas de piel en madera de color rojo, espejos de cuerpo entero y tan pesado que solo 2 hombres podían mover, repisas, vajillas de porcelana algunas figuras de marfil y mármol, tenía todo un tesoro en esa casa, cuando paso el carro de la basura tuvo que llamar a un muchacho para que la ayudara pues eran muchas las cajas de basura ropa zapatos y hasta juguetes que debía sacar. Los vecinos curiosos se quedaron estupefactos de ver cuántas bolsas sacaba de la casa, -espera deja te doy unas monedas- , el muchacho se volvió en sí –no es necesario señorita con todo lo que nos dio es más que suficiente-. Sonrió y dio las gracias en ese momento vio que Leo llegaba en su motoneta -hola querida-
-tienes las cosas listas para empezar la evaluación
-jajajajaja lo dices como si me fueras a hacer un examen
-ps! mas o menos hay que ver la basura que se puede vender
-si tu abuelo te oyera te deshereda
-ash!! No me hables del ruco cuando le dije que era gay casi me lo corta, no entiende que soy así pero no le queda de otra soy el único varón de su descendencia
-jajajajajajaja y tú crees que te deje algo a ti
-mendiga!! Gracias por las buenas intenciones eeeh, anda vamos a ver tus cachivaches aun tengo cosas que hacer
Entraron a la sala una habitación de unos 10 metros cuadrados con duela de madera, un candelabro muy grande para unas 50 velas, rostros de querubines  sobre la chimenea, un vitral de una virgen de un metro de alto por 2 de ancho, Leo saco sus lentes de pasta del estuche, su lap y empezó a teclear, tomo algunas notas y reviso minuciosamente todo y cada uno de los detalles de los artículos, en lo que respectaba a su trabajo era muy profesional, busco información de Internet, abrió una hoja de Excel hizo unos cálculos y después de unas horas dijo –maniwis eh aquí una suma que tiene 5 ceros!!- Anette sonrió dando aplausos y brincos era más que suficiente para realizar su proyecto…